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Las ideologías extremistas, es decir, las ideas elevadas al rango de verdades absolutas, siempre acarrean sufrimiento y muerte cuando quieren imponerse a cualquier precio contra quienes no las aceptan. A veces basta con pertenecer a una nación o a un grupo social para sufrir las consecuencias. Es el caso de los mártires salesianos polacos presentados en este artículo.


Al número de víctimas del nazismo pertenecen también nueve sacerdotes salesianos polacos, los Siervos de Dios don Jan Świerc y los VIII Compañeros: don Ignacy Antonowicz, don Karol Golda, don Włodzimierz Szembek, don Franciszek Harazim, don Ludwik Mroczek, don Ignacy Dobiasz, don Kazimierz Wojciechowski y don Franciszek Miśka, que fueron asesinados in odium fidei en los campos de exterminio nazis en los años 1941-1942. Como sacerdotes, todos los Siervos de Dios se dedicaron en Polonia a diversas actividades pastorales y de gobierno y a la enseñanza. Fueron completamente ajenos a las tensiones políticas que agitaron Polonia durante la ocupación bélica. Sin embargo, fueron detenidos y martirizados in odium fidei por el mero hecho de ser sacerdotes católicos.

La fortaleza y la serena perseverancia que conservaron los Siervos de Dios en el desempeño de su ministerio sacerdotal incluso durante su encarcelamiento representaron un verdadero acto de desafío para los nazis: aunque agotados por las humillaciones y las torturas, desafiando cualquier prohibición, los Siervos de Dios fueron guardianes hasta el final de las almas que se les confiaron y se mostraron dispuestos, a pesar de la debilidad humana, a aceptar la muerte con Dios y por Dios.
El campo de concentración de Auschwitz, conocido por todos como el campo de la muerte, y el de Dachau para don Miśka, se convirtieron así en el lugar del compromiso sacerdotal de estos sacerdotes salesianos: a la negación de la dignidad humana y de la vida, don Jan Świerc y 8 compañeros respondieron ofreciendo, a través de los sacramentos, la fuerza de la gracia y la esperanza de la eternidad. Acogieron, sostuvieron mediante la Eucaristía y la confesión y prepararon a muchos compañeros de prisión para una muerte pacífica. Este servicio se prestaba no pocas veces en la clandestinidad, aprovechando la oscuridad de la noche y bajo la amenaza constante y apremiante de severos castigos o, más a menudo, de la muerte.
Los Siervos de Dios, como verdaderos discípulos de Jesús, nunca pronunciaron palabras de desprecio u odio hacia sus perseguidores. Arrestados, golpeados, humillados en su dignidad humana y sacerdotal, ofrecieron sus sufrimientos a Dios y permanecieron fieles hasta el final, seguros de que quien pone todo en la voluntad divina no queda defraudado. Su serenidad interior y su porte, manifestados incluso en la hora de la muerte, fueron tan extraordinarios que dejaron atónitos, y en algunos casos indignados, a sus verdugos.
Presentamos sus perfiles biográficos.



Don Ignacy Antonowicz

Ignacy Antonowicz nació en 1890 en Więsławice, en el condado de Włocławek, en el centro norte de Polonia. En 1901 ingresó en el liceo salesiano de Oświęcim, donde permaneció hasta 1905. Entre 1905 y 1906 hizo el noviciado en Daszawa. Hizo su profesión perpetua en agosto de 1909 en Italia, en Lanzo Torinese. Fue ordenado sacerdote el 22 de abril de 1916 en Roma. El P. Ignacy enseñó dogmática en el Estudiantado Teológico de Foglizzo (Turín) entre 1916 y 1917. En 1919, durante la guerra ruso-polaca, fue capellán militar en el ejército polaco. Entre 1919 y 1920 estuvo en Cracovia como profesor en el Estudiantado Teológico. El 1 de julio de 1934 fue nombrado consejero de la provincia polaca de San Jacinto en Cracovia hasta finales de 1936. En 1936 asumió el cargo de director del Estudiantado Teológico Salesiano Inmaculada Concepción de Cracovia, que ocupó hasta su detención el 23 de mayo de 1941. Estuvo detenido durante un mes en la prisión de Montelupich, en Cracovia, y después fue llevado al campo de concentración de Oświęcim. Fue asesinado el 21 de julio de 1941. Tenía 51 años, 34 de profesión religiosa y 25 de sacerdocio.

Don Karol Golda

Karol Golda nació el 23 de diciembre de 1914 en Tychy, Alta Silesia. Después de terminar el cuarto grado, se trasladó a la escuela de gramática “Boleslaw Chrobry” en Pszczyna. Cursó sexto en el gimnasio salesiano de Oświęcim. En junio de 1931 fue a la Casa de Czerwińsk para comenzar el noviciado. El 15 de enero de 1937 hizo su profesión religiosa perpetua en Roma. El 18 de diciembre de 1938 fue ordenado sacerdote en Roma, donde permaneció otros seis meses para obtener la Licenciatura en Teología. En julio de 1939 regresó a Polonia. Estalló la Segunda Guerra Mundial y el P. Karol fue a Silesia en octubre de 1939 y después a Oświęcim, donde permaneció, ya que las autoridades de ocupación no le permitían viajar a Italia. A don Karol Golda se le confió la enseñanza de la teología en el Instituto Salesiano de Oświęcim y fue nombrado consejero escolar. Fue detenido por oficiales de la Gestapo el 31 de diciembre de 1941 y asesinado el 14 de mayo de 1942, tras sólo tres años y medio de sacerdocio.

Don Włodzimierz Szembek

El Siervo de Dios P. Włodzimierz Szembek, hijo del conde Zygmunt y de Klementyna de la familia Dzieduszycki, nació el 22 de abril de 1883 en Poręba Żegoty, cerca de Cracovia. En 1907 se licenció en ingeniería agrícola en la Universidad Jagellonica de Cracovia. Durante unos veinte años se dedicó a la administración de las fincas de su madre y al apostolado laico. Cuando cumplió 40 años, la vocación religiosa del Siervo de Dios llegó a su madurez. El 4 de febrero de 1928 entró en el aspirantado en Oświęcim. A finales de 1928 comenzó el noviciado en Czerwińsk. Hizo su profesión religiosa el 10 de agosto de 1929. El 3 de junio de 1934 recibió la ordenación sacerdotal en Cracovia. El 9 de julio de 1942 fue detenido por la Gestapo y llevado a Nowy Targ. El 19 de agosto siguiente fue llevado al campo de concentración de Auschwitz, donde murió el 7 de septiembre de 1942, agotado por el sufrimiento y como consecuencia de los malos tratos sufridos. Tenía 59 años, 13 de profesión y 9 de sacerdocio.

Don Franciszek Harazim

Franciszek Ludwik Harazim nació el 22 de agosto de 1885 en Osiny, distrito de Rybnik, en Silesia. Asistió a la escuela primaria primero en Baranowicze y luego en Osiny. En 1901 ingresó en el Instituto Salesiano de Oświęcim para cursar allí el bachillerato. Completó su noviciado en Daszawa en 1905/1906. El 24 de marzo de 1910 hizo sus votos perpetuos. Fue ordenado sacerdote en Ivrea el 29 de mayo de 1915. Entre 1915 y 1916 enseñó en el Oświęcim Gymnasium, del que fue nombrado director entre 1916 y 1918. En los años 1918-1920 enseñó filosofía en el seminario mayor salesiano de Cracovia (Łosiówka). En los años 1922-1927 el Siervo de Dios ocupó el cargo de director de la escuela de gramática salesiana de Aleksandrów Kujawski. En 1927 regresó de nuevo al seminario mayor de Cracovia como consejero, profesor y educador de clérigos. En julio de 1938, el P. Franciszek fue nombrado profesor en la casa de Cracovia-Łosiówka. Fue detenido por la Gestapo en Cracovia el 23 de mayo de 1941. Primero fue conducido a la calle Konfederacka y después, junto con los demás compañeros, a la prisión de Montelupich. Un mes más tarde, el 26 de junio de 1941, fue llevado al campo de concentración de Auschwitz. Fue asesinado el 27 de junio de 1941 en el famoso Ghiaione. Aún no había cumplido 56 años: de ellos 34 de profesión religiosa y 26 de sacerdocio.

Don Ludwik Mroczek

Ludwik Mroczek nació en Kęty (Cracovia) el 11 de agosto de 1905. En 1917, tras asistir a la escuela en Kęty, fue admitido en el instituto salesiano de Oświęcim, donde completó sus estudios de gramática. Hizo el noviciado en Klecza Dolna. Lo terminó el 7 de agosto de 1922. Emitió sus votos perpetuos el 14 de julio de 1928 en Oświęcim. En Przemyśl recibió la ordenación sacerdotal el 25 de junio de 1933. Ordenado sacerdote, trabajó en Oświęcim (en 1933), en Lvov (en 1934), en Przemyśl (en 1934 y 1938/39), en Skawa (en 1936/37), en Częstochowa (en 1939). El 22 de mayo de 1941, nada más terminar de celebrar la misa, fue detenido y trasladado con otros compañeros al campo de concentración de Oświęcim. Aquí murió el 5 de enero de 1942: tenía 36 años, 18 de profesión religiosa y 8 de sacerdocio.

Don Jan Świerc

Jan Świerc nació en Królewska Huta (hoy Chorzów, en la Alta Silesia) el 29 de abril de 1877. Completó sus estudios de bachillerato en Turín Valsalice. Entre 1897 y 1898 hizo el noviciado en Ivrea. Aquí emitió los votos perpetuos el 3 de octubre de 1899. El 6 de junio de 1903 fue ordenado sacerdote en Turín. En 1911 fue nombrado Director de la Casa de Cracovia por el entonces Rector Mayor P. Paolo Albera. De septiembre de 1911 a abril de 1918 fue Director del Instituto Lubomirski de Cracovia. En 1924, durante un periodo de siete meses, se comprometió como misionero en América. De noviembre de 1925 a octubre de 1934 fue director y párroco en Przemyśl. El 15 de agosto de 1934 fue nombrado Director de la Casa de Lviv. En julio de 1938 asumió el cargo de Director y Párroco de la casa de la calle Konfederacka 6 de Cracovia durante los tres años 1938-1941. El 23 de mayo de 1941 fue detenido por la Gestapo junto con otros hermanos y llevado a la prisión de Montelupich. El 26 de junio de 1941 fue trasladado al campo de concentración de Auschwitz y, al cabo de un solo día, fue asesinado: tenía 64 años, 42 de profesión religiosa y 38 de sacerdocio.

Don Ignacy Dobiasz

Ignacy Dobiasz nació en Ciechowice (Alta Silesia) el 14 de enero de 1880. Habiendo terminado la escuela primaria, en mayo de 1894 fue a Italia, a Turín Valsalice, para hacer allí sus estudios de gimnasia. El 16 de agosto de 1898 ingresó en el noviciado salesiano de Ivrea. Hizo sus votos perpetuos en San Benigno Canavese el 21 de septiembre de 1903. Completó sus estudios filosóficos y teológicos en San Benigno Canavese y en Foglizzo entre 1904 y 1908. El 28 de junio de 1908 fue ordenado sacerdote en Foglizzo. Después regresó a Polonia: desarrolló sus actividades pedagógicas y pastorales en Oświęcim (en 1908, 1910, 1921 y 1923), en Daszawa (en 1909), en Przemyśl (1912-1914) y en Cracovia (entre 1916 y 1920 y en 1922). En 1931 estuvo en Varsovia como vicario. En noviembre de 1934 fue a Cracovia, donde permaneció como confesor y colaborador parroquial. Aquí fue detenido junto con otros salesianos el 23 de mayo de 1941. Tras una breve detención en la prisión de Montelupich, fue deportado al campo de concentración de Auschwitz. El 27 de junio de 1941 murió a causa de malos tratos y trabajos inhumanos. Tenía 61 años de edad, 40 de profesión y 32 de sacerdocio.

Don Kazimierz Wojciechowski

Kazimierz Wojciechowsky nació en Jasło (Galicia) el 16 de agosto de 1904. Huérfano de padre cuando sólo tenía cinco años, fue acogido en el instituto Príncipe Lubomirski de Cracovia. En 1916 comenzó el bachillerato en el instituto salesiano de Oświęcim. En 1920 comenzó el noviciado en Klecza Dolna. Emitió sus votos perpetuos el 2 de mayo de 1928 en Oświęcim. Entre 1924 y 1925 enseñó música y matemáticas en Ląd. El 19 de mayo de 1935 fue ordenado sacerdote en Cracovia. En 1935-1936 estuvo en Daszawa y en Cracovia, donde enseñó religión y fue nombrado director del oratorio y de la Asociación de la Juventud Católica. El Siervo de Dios fue detenido en Cracovia el 23 de mayo de 1941 con otros hermanos salesianos. El 26 de junio de 1941 fue deportado al campo de concentración de Auschwitz donde, al cabo de un solo día, fue asesinado. Tenía 37 años, 19 de profesión y 6 de sacerdocio.

Don Franciszek Miśka

Franciszek Miśka nació en Swierczyniec (Alta Silesia) el 5 de diciembre de 1898. Terminó el gimnasio en el Instituto Salesiano de Oświęcim. Ingresó en el noviciado de Pleszów en 1916. Hizo su profesión perpetua en Oświęcim el 25 de julio de 1923. Completó sus estudios teológicos en Turín-Crocetta. Fue ordenado sacerdote el 10 de julio de 1927 en Turín. A continuación, regresó a Polonia. En 1929 fue nombrado consejero y catequista en el orfanato de Przemyśl. En 1931 y durante los cinco años siguientes estuvo en Jaciążek como director. En 1936 fue nombrado párroco de la parroquia de Ląd. En 1941 fue nombrado director de la casa de los Hijos de María y párroco de Ląd.  El 6 de enero de 1941, el instituto salesiano de Ląd fue transformado por la Gestapo en una prisión para sacerdotes de la diócesis de Włocławek y Gniezno-Poznań. Las autoridades alemanas encomendaron al padre Franciszek la tarea de mantener el orden y atender a los prisioneros. Por razones no especificadas fue trasladado varias veces a Inowrocław y brutalmente torturado allí. El 30 de octubre de 1941, el Siervo de Dios fue trasladado al campo de concentración de Dachau (Alemania). Aquí, sometido a trabajos forzados y a condiciones de vida inhumanas, murió el 30 de mayo de 1942, día de la Santísima Trinidad, en el barracón-hospital del campo. Tenía 43 años, casi 25 de profesión religiosa y casi 15 de sacerdocio.

La fama de santidad y martirio de los Siervos de Dios don Jan Świerc y VIII Compañeros, aunque obstaculizada durante el periodo comunista, se difundió desde su muerte y se manifiesta viva aún hoy. Fueron considerados sacerdotes ejemplares, dedicados a la labor pastoral y a las obras de caridad, afables, siempre disponibles, interesados en dar gloria únicamente a Dios, por cuya causa fueron fieles hasta el derramamiento de su sangre.

El 28 de marzo de 2023, los Consultores Históricos del Dicasterio para las Causas de los Santos emitieron votos afirmativos sobre la Positio super martyrio de los Siervos de Dios Juan Świerc y VIII Compañeros, Sacerdotes Profesos de la Sociedad de San Francisco de Sales, que fueron asesinados in odium fidei en los campos de exterminio nazis en los años 1941-1942. Rezamos para que sean elevados a los honores de los altares lo antes posible.


Mariafrancesca Oggianu
Colaboradora Postulación General Salesiana